EDITORIAL: PARARSE AL FRENTE

Editorial: Standing in front

Daniel Fernando Ruiz Garzón

Estudiante de Artes Plásticas | Universidad de Caldas | daniel.12011257@ucaldas.edu.co

Pararse al frente, quedar desnudo, exponerse a las ideas del otro, es dejar claro un punto: marcar un territorio desde donde se posiciona ante algo, abrirse a toda consecuencia. Unos se paran frente al Estado, frente al Sistema, frente al circuito o mercado del arte, frente al paisaje o la ciudad y todos logran simbolizar algo similar, logran enfrentarse a lo que creemos inmenso sin permitir que nos anule.

Alguna vez se llegó a pensar que no había nada más sublime que la amplitud del paisaje porque devolvía a cada uno un aire de espíritu y libertad, impulsando a naufragar en los bosques; porque nos hacía sentir, aunque suene redundante, minúsculos. El cuerpo delimita, siente y recibe, pero al quedarse quieto marca el espacio, observa y recibe un golpe de vuelta. Eso, la mirada que regresa, es el acecho del espacio observado, porque creer que sólo el sujeto es el que mira es un error.

Una sensación extraña se extiende desde los ojos, seca la boca, hace sudar las manos y provoca el bailoteo de las rodillas, el cuerpo advierte que se va a situar frente a un público. Pero aquello no sólo se experimenta al pararse frente a un marullo de gente: el grafitero pinta sobre un muro en la calle batiendo el aerosol para sacar el último jugo que dará sabor al daño, su daño; el muro, rugoso, absorbe la pintura en segundos, observando como las luces de la policía le generan sudor y duda a quien sobre él pinta.

El artista emergente, pobrecito, es el que más sufre de dicha sensación cuando tiene que presentar su exposición, su proyecto o responderle a un señor preguntón qué significa su obra. El mercado del arte está plagado de miradas, de comentarios que corren por el ambiente bochornoso de los que se creen con el derecho de determinar quién entra a su circuito y quién no; y al afortunado al que le permiten la entrada, con todo el cuento de hadas, cruza la puerta contento porque cree que ya nada podrá tocarlo, ignorando que sus piezas poco a poco dejarán de ser suyas, adentrándose en un vaivén de discusiones en torno a quién merece más o menos pago por su trabajo. Es ahí donde empieza un choque que le da al artista el impulso necesario para situarse delante, levantándose como una rama rebelde que se separa del tronco principal, acercándose cada vez más al regusto agridulce que deja lanzar una crítica.

¿Por qué importa tanto la mirada del otro? Esta preocupación reside en que quien escucha y mira es quien valida lo dicho, incluso cuando se refuta ¿Qué sería del Sistema, del paisaje, de la ciudad, del mercado del arte, si no hay nadie que pueda hacerle frente? Los textos que habitan este número y cada una de sus secciones, existen como un grito al aire; pero también son algo más que eso, funcionan como un pequeño susurro que pasea despacio, que termina siendo igual de doloroso, mordaz, fuerte y directo como un rugido al cielo.

Como citar:
Ruiz, D.-F. (2024). Editorial: Pararse al frente. Portal Error 19-13. Revista de arte contemporáneo 4 (6). Disponible en: https://portal-error-1913.com/2024/12/02/editorial-pararse-al-frente/

Fecha de recibido: 5 de octubre de 2024 | Fecha de publicación: 11 de diciembre de 2024

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